Esta noche tocaba ternera. De hecho tengo que comerla dos veces por semana para tener controlado el hierro. Además de espinacas y demás.
El día que como ternera, igual que cuando me tomo Ferogradumet, me la tomo acompañada de un cítrico para que el cuerpo asimile mejor el hierro. Así que, de postre, hoy toca naranja.
La ternera en sí me parece muy sosa. Menos mal que hay tropecientas salsas para acompañar y formas de cocinarla.
Hoy, mientras la ponía en la sartén, se me ha ocurrido hacerle unos cortes y, un poco antes de apagar la vitrocerámica, echarle un chorro de miel. La miel (casera, de Morella), se iba deshaciendo y dándole sabor a la carne.
Seguidamente, nuez moscada y hierbas provenzales.
Aquí tenéis la foto, lo que veis oscuro en el plato es una vinagreta de frambuesa, de unos pruébame gratis de estos que publicamos 😉 Era para decorara pero no hace muy buen efecto :(.
El sabor de la miel en contraste con la carne, me ha encantado. Aquí queda esta receta por si os apetece probarla si no lo habéis hecho.
¡Buen provecho!
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