Tienes un presupuesto y tratas de ceñirte a él. Pero a veces, algo te llama la atención y no puedes evitar desearlo.
Puede que te digas a ti misma que esperarás hasta más tarde para comprarlo, pero de alguna manera parece que todos los planetas se alinean para que, de verdad, nazca en ti una necesidad imperiosa de poseerlo.
Muchas veces, sin darnos cuenta, reaccionamos de esta manera por motivos emocionales pero la mayoría por técnicas que vienen del exterior.
Mira la técnica de ahorro de las 4 preguntas
Y antes de darte cuenta, te has saltado el presupuesto del mes.
Es fácil caer en esta trampa, pero hay una forma de evitarla: la regla de las 72 horas.
Qué es la regla de las 72 horas y cómo puede ayudarte a ahorrar dinero
Esta regla es sencilla: no tomes ninguna decisión de compra en respuesta a un estímulo. De esta forma tomas decisiones en frío, meditadas.
El consultar con la almohada de toda la vida pero, en este mundo en que vamos tan deprisa y que todo lo queremos para ya, pararse a reflexionar no es lo habitual. Somos presas de las compras por impulso.
Así que si buscas manejar tu dinero de manera consciente debes pararte a pensar antes de comprar algo que no tenías en la lista.
En otras palabras, no compres nada a menos que hayas esperado al menos 72 horas sin ver ni oír nada sobre el producto.
Eso significa que no tienes que exponerte a anuncios, ni a reseñas, ni nada que tenga que ver con él.
Date un poco de tiempo para tomar distancia y tomar la mejor decisión para tu economía.
Si puedes resistir el impulso de comprar algo durante tres días, es muy probable que ya no lo quieras.
Y si sigues queriéndolo después de que hayan pasado 72 horas, entonces sigue adelante y cómpralo, pero sólo si te lo puedes permitir y al mejor precio posible.
¿Conocías la regla de ahorro de las 72 horas?