En esta época de crisis debemos ajustar al máximo nuestro presupuesto familiar y evitar los gastos hormiga, pero también debemos estar alerta de las trampas psicológicas que utilizan los comercios y las empresas para que gastemos más dinero del que teníamos pensado. Recuerda que cada empresa tiene detrás un proyecto de marketing con el que pretenden crearnos una necesidad aunque no la tengamos 😉
Como siempre te digo, al ir al supermercado debemos llevar una lista de la compra bien pensada después de haber elaborado un menú semanal o mensual y de haber hecho inventario de lo que tenemos en casa para no terminar «picando» y llevándonos cosas que no nos van a aportar nada. Puedes ir pinchando en los enlaces que están en rosa, ahí encontrarás cada tema desarrollado.
10 «trampas psicológicas» de los supermercados
Aunque pienses que esto lo has oído mil veces y que a ti no se te engaña fácilmente lo cierto es que TODOS terminamos cayendo en las redes de las empresas si bajamos la guardia, y es que como te he dicho, detrás de cada acción hay un plan de marketing muy bien pensado para que gastemos dinero. ¿Nunca has entrado al supermercado a por dos cosas y has salido con una bolsa llena y 20 euros menos en la cartera? Pues a continuación te voy a explicar cómo lo consiguen.
Colocar lo que quieren vender a la altura de los ojos
Cuando hagas la compra no te fijes solo en los productos que te ponen en las baldas que tienes a la altura de los ojos. Ahí suelen colocar las primeras marcas que no suelen ser las más baratas, sin embargo, la marca blanca y los productos con descuento los encontrarás en las baldas inferiores.
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Música relajante
Los supermercados buscan que hagas la compra relajadamente, sin prisas, para que llenes el carro y te dejes más dinero. Por eso la música es suave, los pasillos son estrechos y no hay ventanas ni relojes para que pierdas la noción del tiempo.
Precios en rojo (aunque no sean ofertas)
Solemos relacionar los precios en rojo en carteles grandes con descuentos y ofertas pero eso no siempre es así y a veces utilizan el reclamo de los números en rojo para que creamos que hay un gran descuento. Pero párate un momento y haz números para ver si compensa. De lo que no te puedes olvidar es de los cupones descuento para imprimir.
Diferentes ofertas para que no puedas hacer cuentas
En el supermercado no quieren que vayas haciendo cuentas a medida que vas comprando porque eso puede hacer que al llegar a una cantidad que lleves prefijada dejes de comprar, por eso intentan «liarnos» poniendo precios por unidad, por kilo, le hacen un 50% de descuento a la segunda unidad, ofertas 3×2, te descuentan un 30% al pasar por caja… así se aseguran de que no te fijes en las cuentas.
Productos saludables a la vista
En la mayor parte de establecimientos de comestibles la fruta y la verdura fresca está colocada en grandes cajones en una zona muy visible del supermercado dónde se resaltan los colores rojos, naranjas y verdes para transmitir frescura. Esto hace que nuestro subconsciente crea que vamos a hacer una compra saludable en un lugar agradable y de confianza.
Cambiar de sitio los productos básicos
Si no encuentras algo sin lo que no te puedes ir a casa como leche, aceite o arroz darás vueltas por el supermercado hasta que lo encuentres y de paso irás picando con otras cosas que te irás encontrando. ¡Negocio redondo! Esto los supermercados lo sabes y por eso cambian las cosas básicas constantemente de sitio.
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Productos frescos con fondos blancos
Aunque algunos establecimientos han optado por eliminar la pescadería, la carnicería y la charcutería, los supermercados que dan este servicio consiguen vender más ya que no es lo mismo ver una merluza brillante con una luz maravillosa sobre hielo que ver un pez envuelto en plástico en una nevera. Para fomentar las ventas ponen los frescos sobre fondos blancos para transmitir frescura.
Pan y bollería cerca de la puerta
El rico olor a pan y bollería recién hecha hará que se te abra el apetito y que metas en el carro (cada vez más grande y profundo) todo lo que se te vaya antojando. Además, te sentirás como en casa 🙂
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Compra a domicilio
La mayor parte de las tiendas de alimentación han implantado un servicio de compra a domicilio gratuito (que yo personalmente utilizo siempre para fomentar que se creen puestos de trabajo) con el que te llevan la compra a casa sin ningún coste si gastas más de 50€, por ejemplo. Con esto consiguen que si tenías pensado gastarte 40€ compres más cosas para llegar a esos 50 euros con los que te llevan la compra a casa.
Tentaciones en las cajas
Y mientras esperas en caja a que llegue la hora de pagar tienes alrededor todo tipo de chucherías para que vayas añadiendo al carro y así se vaya engrosando la cuenta. Porque además, en caja encontramos pequeños envases que pagamos caros.
