Durante el confinamiento en casa nos dedicamos a hacer limpieza general con tan mala suerte que al vaciar el armario una de las maletas cayó en nuestra mesita de madera (menos mal que fue en la mesa y no en nuestra cabeza) y como el canto es de plástico duro dejó una abolladura bastante fea.
Se trata de una mesa con la que llevamos 10 años y se ha conservado como nueva y justo ahora, en el peor momento, va y se abolla (y la verdad es que comprar una nueva nos viene fatal ahora mismo).
El caso es que siempre había oído que aplicando un paño húmedo la madera se reparaba (incluso en una de mis novelas favoritas, Amor, curiosidad, prozac y dudas mencionan este truco) así que me puse a investigar un poco cómo era el truco completo ¡y funciona! asi que aquí lo tenéis.
Y ojo, no tiene que ser una abolladura, por ejemplo, si has dejado un vaso y se queda la marca también puedes utilizar este truco.