¡Hola, hermosuras!
Os traigo una de las recetas más sencillas y ricas del mundo. Ésta es la básica, la receta madre y se puede variar con todo lo que se os ocurra. Me salva cuando apenas tengo tiempo de cocinarme algo rico.
¡Hola, hermosuras!
Os traigo una de las recetas más sencillas y ricas del mundo. Ésta es la básica, la receta madre y se puede variar con todo lo que se os ocurra. Me salva cuando apenas tengo tiempo de cocinarme algo rico.
Estas hamburguesas de avena puedes ponerlas entre pan o acompañarlas con una ensalada… o pueden, incluso, evolucionar y convertirse en unas albóndigas en salsa o para un cocido. Como os digo, esta receta da mucho juego.
Necesitamos para hacer 6 pequeñas o 4 de tamaño normal:
Vertemos la avena en un bol y mezclamos bien con el sazonador. Añadimos el agua y amasamos, primero con un tenedor y después con las manos, durante varios minutos.
La masa no debe quedar muy dura (si lo hiciera tendremos que añadir muy poquito a poquito agua) ni tampoco líquida. Cuando tenga la textura homogénea, hacemos bolas y chafamos dándole forma redondica.
Podéis pasarlas directamente en pan rallado para que queden más crujientes en la sartén. Las ponemos en una sartén antiadherente con un pelín de aceite, vuelta y vuelta unos 3 minutos por cada lado a fuego medio, o hasta que tengan el color que os guste y servir.
La avena la compro en Mercadona por 0,89€, así que, aproximadamente salen unas 10-12 medianas…. la hamburguesa nos sale por diez céntimos a malas penas… y ¡merece mucho!
Ideas para añadir a la masa: champiñones laminados, cebolla pochada, pimientos picados, otros sazonadores e hierbas… Con esta receta y una pequeña variación puedes reinventarte cada día: se me hace la boca agua de sólo pensarlo.
¡Espero que os haya gustado y os animéis con ella! ¡Hasta la próxima receta!
Ainhoa
Toda la comida que comparto es 100% vegetal, sin derivados animales y sin gluten.