Uno de los platos más recurrentes cuando nos vienen invitados son las empanadillas, no sólo porque las podemos rellenar de los ingredientes que más nos gusten, sino porque además son muy sencillas de elaborar.
Pero hoy queremos ofrecerte una idea de hacer empanadillas con una presentación original y con una preparación diferente a la que estarán tus comensales a consumir: triángulos de morcilla y manzana al horno.
¿Qué necesitamos?
- Sobre de masa de empanadillas (16 unidades)
- Dos morcillas pequeñas
- Media cebolla
- Una manzana
- Lonchas de queso (4 para 16 empanadillas)
¿Cómo las realizamos?
- Lo primero que tenemos que hacer es preparar el relleno, que debido a los ingredientes, se cocinan con mucha rapidez. Picaremos la cebolla muy fina y la pocharemos en una sartén durante un par de minutos. Después, añadiremos la manzana troceada o en láminas; como se deshará en el fuego, no importa como incorporamos la manzana al fuego.
- Quitamos la piel de las dos morcillas y las echamos a la sartén un par de minutos después de añadir la manzana. Con ayuda de una cuchara de palo la empezamos a deshacer y vamos removiendo todo para que mezclen los sabores y aromas. Cuando la morcilla empiece a hacer (será unos dos o tres minutos), retiramos del fuego y reservamos.
- En una bandeja de horno extendemos las 16 láminas de empanadillas y ponemos a calentar el horno a 180 grados. Cogemos una loncha de queso y la dividimos en cuatro partes; ponemos un ‘cuadradito’ sobre cada empanadilla, así hasta llenar las 16 empanadillas. Después, repartimos la mezcla de morcilla, cebolla y manzana en pequeños montones hasta completarlo.
- Llega el momento de hacer esta curiosa forma triangular, pero para mi gusto, mucho más rápida, fácil y atractiva que las clásicas empanadillas en forma de abanico. Con ayuda de los dos dedos índices y pulgares levanta los bordes y ve haciéndoles una forma de triángulo. No es necesario que los bordes queden pegados unos con otros, sino con que se mantenga la forma al meterlo al horno es suficiente. Déjalo unos 15 o 20 minutos a 180 grados y ¡listas para degustar!
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