Todas queremos buscar ese ahorro que nos ayude a mantener una buena economía doméstica y de vez en cuando recibimos alguna que otra sorpresa como la que llega desde el Gobierno.
Por lo visto, han asegurado que se encuentran preparado un sistema de “certificados blancos” para que las comercializadoras puedan acreditar el cumplimiento de las obligaciones europeas acerca de la eficiencia energética.
Hacer una instalación de dispositivos más eficientes con la energía es algo bastante caro y el Gobierno también lo sabe.
Estos certificados blancos demostrarán el esfuerzo que se realice para conseguir una mayor eficiencia energética. Serán una obligación para las comercializadoras de energía y podrán conseguirlos siempre en función de las medidas que se tomen en relación a esta eficiencia en los edificios.
Con estas medidas, nuestro sistema se parecerá al británico, donde se tiene muy en cuenta el ahorro sin sacrificar la calidad de los servicios.
Los certificados podrán negociarse de una manera sencilla y contarán con una reducida carga administrativa. Con ellos, desde el Gobierno se calcula que habrá un ahorro anual de un 1,5% de energía, lo que permitirá a nuestro país poder recortar el consumo hasta en un 10,5% hasta 2020, lo que repercutirá positivamente en nuestro bolsillo.
Con un poco que ponga todo el mundo de su parte, seguro que pronto iremos viendo cómo los precios de la energía se van estabilizando y poco a poco irán a la baja, lo que nos vendrá formidable para tener más control sobre el presupuesto doméstico.
