La crema catalana es un postre típico de Cataluña que podemos pedir y hacer durante todo el año. Dulce, con crema quemada y unos ingredientes clave, es fácil hacerla en casa y elaborar un postre sencillo, además de riquísimo. ¿Te animas?
Para la receta cogeremos 1,5 l de leche, 4 o 5 yemas de huevo, 150 gr de azúcar, 1 corteza de limón, 1 canela en rama y le podemos añadir 1 o 2 cucharadas de maizena. Debe quedar muy espesa para que tenga la consistencia que queremos conseguir.
Empezaremos calentando la leche en un cazo pequeño a fuego lento (no es necesario que sea grande). Después batiremos los huevos en un bol, con azúcar, y mezclaremos. Mientras está en el fuego, añadiremos a la leche la corteza de limón que se puede ir deshaciendo, la maizena en caso de que la queramos poner y la canela.
Después, echamos la mezcla obtenida de los huevos y el azúcar al cazo con la leche e iremos removiendo, dejaremos hervir unos minutos y luego lo retiraremos. Posteriormente, vamos a verter la mezcla resultante en platos de barro más bien pequeños (que es como se sirve en Cataluña) y dejamos enfriar la mezcla, aunque puede tomarse también caliente. Se puede dejar reposar en la nevera, pero eso es opcional.
Finalmente y algo importante es tirar azúcar encima de los platos con la crema y quemarlo, con un soplete o quemador, para que quede esa capa cristalina crujiente totalmente inconfundible y con sabor a caramelo. Y ya lo podemos servir. Realmente es muy fácil porque la crema catalana viene a ser una natilla de toda la vida pero con el azúcar quemado por encima. Si la has hecho alguna vez, cuéntanos tu experiencia.
Si la haces pronto, disfrútala!! Y no dejes de visitar nuestra sección recetas.
