5 trucos para ahorrar en la pescadería
Sabemos que en una dieta equilibrada y saludable ha de estar presente el pescado ya que es un alimento con excelentes propiedades (aporta proteínas y vitaminas, mejora y previene enfermedades cardiovasculares…).
Sin embargo, puede que con la crisis hayamos decidido reducir su consumo o recurrir a pescado congelado o de menor calidad para ahorrar, lo que, en último término, no deja de ser un error. Deberíamos tomar pescado, al menos, tres veces por semana y podemos hacerlo de forma económica y sana si seguimos estos consejos:
- Conviene evitar las grandes superficies e ir al mercado de toda la vida. Ahí podemos valorar precios y ofertas en varias pescaderías, al tiempo que encontramos más variedad de pescado.
- Es mejor acudir a la pescadería a primera o a última hora: a primera hora, por supuesto, hay menos gente y más de dónde elegir, de modo que se tiene más margen para comprar aquello que nos interesa y tiene mejor precio. A última hora, lógicamente, no encontraremos tanta variedad, pero sí precios más golosos con la intención de dar salida al género (especialmente el sábado).
- Resulta aconsejable que vayamos a la pescadería con una actitud abierta, de modo que adaptemos nuestra compra a las ofertas o precios más interesantes que encontremos (en la medida de nuestras necesidades, claro). Siempre podemos congelar aquello que no vayamos a consumir para la ocasión que más nos convenga.
- El pescado de temporada (y esto es aplicable a otros alimentos como, por ejemplo, las frutas y verduras) siempre tiene mejor precio y calidad.
- Para ahorrar un poco, también podemos comprar el pescado en unidades (cuatro filetes, por ejemplo, para una familia de cuatro miembros) en lugar de al peso. Igualmente, la opción contraria puede ser más económica, es decir, comprar una pieza para, posteriormente, cortarla en casa.
Por último, no podemos olvidar que siempre hay tipos concretos de pescado que, generalmente, resultan económicos, sabrosos y sanos, tales como las sardinas, los boquerones o la caballa.
Como veis, una alimentación saludable no está reñida con el bolsillo. ¿Qué trucos tenéis vosotras para ahorrar en la pescadería?