Si hay un plato que no puede faltar en nuestra comida de los sábados en casa de mi suegro, son los espagueti. Pero no sirve cualquier receta si no la que, con todo el amor del mundo, hace mi querido suegro.
Tanto niños como mayores estamos «enganchados» a sus espagueti. Él nos dice que son muy fáciles de hacer pero seguro que ahí tiene mucho que ver el cariño con el que los cocina para sus nietos, principales fans de las recetas de su abuelo Miguel.
Hoy he tomado nota, para vosotras, de los pasos a seguir así queahí va la receta:
– Para hervir la pasta: calentar un cazo con agua, sal, un chorrito de aceite, 2 hojas de laurel. Cuando ya hierva, añadimos los espaguetis y removemos bien. Cuando veamos que están al dente, los escurrimos.
– Para la salsa: calentamos en una sartén un poquito de aceite, le echamos salchichas a trocitos (podéis poner otro tipo de carne pero a los niños les gustan mucho). Cuando están hechas, le añadimos tomate frito de bote (aunque natural aún sale más bueno) y una cucharada de azúcar. Removemos.
En unos 5 minutos tenemos hecha la salsa.
Unimos pasta y salsa en un bol o cazuela grande, mezclamos y servimos con un poco de queso rallado (si os gusta, claro).
Aquí otra muestra de lo a gusto que se lo comen los niños. Mi sobrina Júlia que, aún con la carita llena de tomate, sigue siendo una princesa.
Esta fácil receta de espaguetis es perfecta para la comida del sábado con la familia pero también para cualquier día de la semana en que no quieras dedicar demasiado tiempo a la cocina. Las salchichas añaden un sabor delicioso a la salsa de tomate y la pasta se cocina al dente.
Os animo a que probéis esta receta y dejéis vuestros comentarios. Si os apetece, iremos publicando otras recetas fáciles y resultonas ;-).
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